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Premiados 13 jóvenes destacados por sus habilidades en la comunicación escrita, en el XII Certamen Nacional de Ensayo Científico. Doce de ellos de Costa Rica y uno como contribución extranjera, de San Luis de Potosí, México. En esta edición del certamen se recibieron trabajos de jóvenes de 6 provincias. Sólo estuvo ausente Limón, en el que se proyectarán más acciones de extensión el año entrante. La recepción por formulario en web resultó muy exitosa y eficiente. El viernes 29 de octubre se realizó la premiación en el Auditorio de la Facultad de Filología y Letras de la Universidad Nacional, en Heredia. Como parte de la acciones de celebración del 'Año Internacional de la Biodiversidad", este año se dedicó el certamen al tema: La biodiversidad en ambientes marino costeros Los semifinalistas fueron evaluados en dos grupos etarios y por idioma: español o inglés.
Los estudiantes escribieron un ensayo como prueba final de sus habiliades comunicativas y su autoría.
Los dos jurados se reunieron para verificar a los autores y dar los lugares finales Después de un exhaustivo proceso, que se inició con la recepción y evaluación de todos los ensayos del 15 de agosto al 15 de setiembre, seguido de una categorización y verificación de originalidad en el siguiente mes, se finalizó con una prueba presencial y la declaratoria del orden de los finalistas y la premiación. LOS GANADORES DEL 2010
Los primeros y segundos lugares recibieron cámaras fotográficas de premio, además de giras educativas y publicaciones. Los terceros lugares y la mención honorífica recibieron giras educativas y Lunarios de CIENTEC. Todos, además, tendrán su ensayo publicado pronto en el Centro Virtual de Ciencias de CIENTEC, donde reciben miles de visitas semales. A continuación el orden de galardonados.
Ensayos ganadores en español CATEGORÍA 13 a 15 años
Tal vez se pregunten ¿por qué escribir un ensayo sobre la biodiversidad en los ambientes marinos costeros? , y ¿cuál es su verdadera importancia? Esas fueron las preguntas que yo misma me formulé, y luego de meditarlo y analizarlo por algún tiempo, creo que ya tengo las respuestas a esas interrogantes tan sustanciales. Vivimos en una sociedad consumista, que busca tener más y más, aún más de lo que necesita, pero, si alguna vez nos pusiéramos a pensar que tal vez ahogados en nuestro consumismo, ¿podríamos llegar a consumir la vida de las futuras generaciones, incluyendo la nuestra? Pues esta es la realidad, no somos tan autosuficientes como pensamos; dependemos de los recursos que la naturaleza nos brinda, y de la diversidad de estos; en ese sentido, quiero resaltar los ambientes marinos costeros, debido a que muchos subestiman la utilidad que poseen y la manera activa en que influyen en nuestra vida diaria. Múltiples beneficios obtenemos de estos: fuente de alimentación, turismo, recreación, transporte, empleo y extracción de minerales y recursos, y muchos otros beneficios más. Todas y cada una de las especies desempeñan una labor específica dentro de un ecosistema, y cada ecosistema, dentro de la biosfera; esto crea una relación de codependencia entre todos los seres vivos que habitan el globo; de aquí la importancia de mantener un equilibrio que permita la conservación de la vida y de las otras especies. En este equilibrio se debe destacar el que debe mantenerse dentro de la cadena alimentaria, ya que todos los organismos vivos formamos parte de esta, y si alguno de los miembros falta, se verá alterado el orden natural que esta conlleva y múltiples consecuencias se verán atraídas. Entre las causas que provocan la extinción y destrucción de especies marinas, se denotan la contaminación de los mantos acuíferos, la eliminación de desechos fecales, aguas jabonosas y desechos químicos y tóxicos provenientes de industrias y centros hospitalarios a mares y ríos. Y no solo las industrias y los hospitales tienen culpabilidad en esto, sino también cada uno de nosotros que no propicia una cultura de limpieza y de respeto por nuestro medio ambiente y las otras especies; nosotros, que en lugar de votar una botella plástica al basurero pensamos que la forma más fácil y práctica de deshacernos de ella es arrojarla al mar, donde posiblemente nadie lo notará y nadie se dará cuenta de lo ocurrido, pero la verdad es que todos se darán cuenta de ello, al ver las consecuencias que este sencillo acto conlleva, como el temible cambio climático y el agotamiento de los recursos naturales; tal vez algunos piensen que estoy exagerando; que por tirar una simple botella al mar no pasará nada de esto, pero ¿que tal si existen más personas que mantengan esa misma mentalidad? Ya no sería una botella, ni dos ni tres, serían cientos y miles de ellas. Pongo por ejemplo una botella, pero siendo más realistas, al mar se tiran todo tipo de desechos, de todas las formas y tamaños; la mayoría de ellos no es biodegradable, sino hasta dentro de muchos siglos y milenios. Así que viendo todo esto, ¿no sería más efectivo llevar esa botella plástica a reciclar o depositarlo por lo menos en el lugar adecuado; es decir, un basurero? ¿Tan difícil es hacer lo correcto? No hablo de hacerlo por mantener limpias las aguas y conservar las especies marinas, ahora hablo de hacerlo por la conservación de nuestra propia especie. Creo que ya es tiempo de reaccionar y pensar que estamos recogiendo los frutos de lo que hemos sembrado a lo largo de los años, y pensar sobre todo en que sea como sea podemos cambiar esta realidad, tomando conciencia del daño que nos estamos haciendo a nosotros mismos y a los demás. ¡Cuidemos los ambientes marinos costeros! No quiero sonar como una ambientalista más, porque no lo soy; lo hago con el más grande egoísmo, porque lo único que busco es tener un futuro donde y pueda seguir consumiendo pescado fresco e ir todos los veranos la playa sin tener que nadar en un mar desechos y coliformes. ¿Será posible lograrlo? ¡Pues claro que sí! Pero no es algo que pueda lograr yo sola; es un trabajo que debemos efectuar en equipo; todos juntos, tomando conciencia, respetando la vida y valiendo las necesidades que tenemos de los ambientes marinos costeros y su diversidad, así que cuidémoslos, porque los necesitamos.
En estos días, se escucha sobre la biodiversidad a menudo. La palabra en sí se sobreentiende: diversidad biológica. Según el artículo “Importancia de la biodiversidad” de la página Ciencia al día, el término significa: “la variedad de especies de seres vivos que habitan un territorio”. Simple de entender. Pero, ¿cuál es su importancia?, ¿será fácil de mantener? Específicamente este ensayo trata sobre la biodiversidad marina y no cualquiera, sino la de Costa Rica. Este país no lleva su nombre por cualquier cosa, lo lleva así por la belleza de sus costas, su tesoro más grande. ¿Su importancia? La biodiversidad sirve para mantener el equilibrio ante los seres vivos y lo que está a su alrededor, pero su aporte va más allá de esto. Es indispensable para el día a día del ser humano: comida, materiales, productos cosméticos y medicinales. Es también un instrumento para el desarrollo de un país. Elizabeth Boo (1990), del WWF en su libro La explosión del ecoturismo, da a conocer este término, lo define como: “turismo de la naturaleza que promueve la conservación y los esfuerzos para un desarrollo sostenible”. La biodiversidad es fundamental para llevar a cabo el ecoturismo, por medio de actividades como: senderos, buceo, fotografía y pintura de paisajes, entre otros. Hay que agregar que la biodiversidad ayuda para el aprovechamiento recreativo y contribuye con el bienestar de las futuras generaciones. Costa Rica es uno de los veinte países con mayor biodiversidad del mundo, gracias a varios factores. Su posición geográfica es importante, ya que está en la zona tropical, un clima ideal para el desarrollo de distintas especies. Posee dos costas, además del Sistema Montañoso Central que da origen a la humedad y microclimas. Hay que dejar claro además que Costa Rica está entre dos grandes fuentes de especies: Norteamérica y Sudamérica. Como se mencionó, Costa Rica lleva su nombre por la belleza de sus costas que representan biodiversidad pura. Miles de especies y variedad de ecosistemas. Los mares costarricenses tienen al menos 6.777 especies, un 3,5% de las especies conocidas en el planeta. Posee dos costas, al este la costa caribe, de 210 km de longitud, que tiene abundantes arrecifes coralinos y fósiles, bien desarrollados. Con 1 106 km de longitud está la costa pacífica al oeste, de gran cantidad de manglares y arrecifes. En el océano Pacífico está la Isla del Coco, que es considerada centro de distribución de especies para la región Indo-Pacífica. El país es reconocido por su biodiversidad y aporte para la conservación. Un ejemplo: Costa Rica es uno de los pocos países dentro del Convenio Internacional de Humedales. Los humedales representan un 7% del territorio nacional y diez han sido declarados de importancia universal. Para proteger la vida marina se han creado áreas silvestres, reservas y refugios. Con respecto a la investigación sobre las especies marinas del país, los profesionales estiman que de la cantidad total de especies, un 47% son moluscos, un 21% peces y un 9% decápodos. Según el “Diagnóstico sobre la Investigación Marino-Costera en Costa Rica”, en el Pacífico los más investigados son los peces y los moluscos. En el Caribe, los peces y los corales. La administración de la ecología costarricense está en manos del MINAET y dentro de este, específicamente en manos del SINAE. Los estudios marino-costeros son realizados por la UCR y la UNA. Además, organizaciones no gubernamentales como el INBio, la CCC, PRETOMA y el INRECOSMAR, entre otros. Costa Rica tiene una biodiversidad privilegiada gracias a muchos factores, como su posición geográfica y la humedad, pero el país no ha dejado este tesoro a un lado. Pocos países han dado el paso de velar por la conservación de la biodiversidad; Costa Rica es una excepción. Sin embargo, estudios confirman que hay mas impulso en las zonas terrestres, porque se desconoce el gran potencial en las zonas costeras. ¿Qué hacer? No es muy difícil. Principalmente, asegurar estrategias establecidas por profesionales, integrar las ideas sobre el tema en comercios y empresas, asegurar recursos financieros y tecnológicos y promover conciencia en la población. A final de cuentas, la necesidad de preservar la biodiversidad nos llevará a mantener un mundo estable.
Como seres partícipes del entorno en el que nos desenvolvemos, veo la necesidad de recalcar la importancia de los elementos que conforman nuestra naturaleza. Este último término nos conecta directamente con lo que es la biodiversidad y, por tanto, con sus componentes. ¿Pero estamos completamente conscientes de lo que esto significa? Como primer punto, nos aseguraremos de ello. La biodiversidad se refiere a la amplia variedad de seres vivos sobre la Tierra y al resultado de miles de millones de años de evolución según procesos naturales, así como la influencia creciente de las actividades del ser humano. Comprende, igualmente, la variedad de ecosistemas y las diferencias genéticas dentro de cada especie que permiten la interacción de muchas formas de vida y seres abióticos. El agua es un elemento abiótico que representa, aproximadamente, el 71% de la superficie terrestre. Por lo tanto, el ecosistema marino constituye una gran parte de la flora y la fauna a escala mundial. Sin embargo, no se le da la importancia que merece. Es más, los estudios sobre este tema son escasos e incompletos. La falta de desarrollo sostenible y leyes que penalicen actividades que pueden dañar a este ecosistema, son un reflejo de ello. Otro ejemplo de lo anterior es el peligro que corren especímenes como la ballena azul, las tortugas marinas y los tiburones, debido a esta falta de conciencia. La ballena, además de ser el animal más grande el mundo, tiene características impresionantes: su corazón y su cerebro tienen magnitudes mucho mayores que las de un ser humano y su espíritu proteccionista es digno de admirar. Sin embargo, en muchas ocasiones son asesinadas brutalmente para no sólo el consumo de su carne, sino también para la producción de objetos como raquetas de tenis... Las tortugas marinas, por su parte, son increíbles nadadoras y luchadoras que sufren desde antes de su nacimiento ya que gran cantidad de huevos recién desovados son extraídos. Actualmente, en las zonas costeras de nuestro país se apoyan campañas para asegurar el bienestar de las tortugas, más comunes en nuestro país, baulas, verdes y loras cuando es tiempo de desove. Los tiburones están muy lejos de ser los más temidos, por lo menos para los explotadores. Esto, debido a que el aleteo se ha convertido en una práctica normal en los últimos años. Los cazadores capturan al animal, lo suben a bordo, le cortan las aletas y lo arrojan vivo al agua, en donde morirá ahogado en una lenta agonía, por la falta de movimiento. Estos asombrosos animales son tan solo tres ejemplos de las hermosas especies que encierra el océano. Lo más triste de todo es que además de estos crueles maltratos, su hábitat también es afectado por la pesca intensiva, la contaminación del agua y la lluvia ácida, principalmente. Hay que recordar que los ecosistemas marinos, además de su variada fauna, poseen infinidad de recursos. Cada uno de ellos es fundamental para el cumplimiento de nuestras necesidades y el correcto funcionamiento de la naturaleza. Lo que hay que recordar es que el equilibrio es necesario en todo ecosistema y que lo último que se quiere es utilizar el término extinción o desequilibrio, ya que tales aspectos serían traducidos en caos y desesperación. Entonces, expuesto lo anterior por qué no entendemos la necesidad de ser más responsables. Informar y concienciar a las personas sobre el daño que se le está causando al planeta porque, al parecer, la sociedad actual ha sido cegada por un individualismo y una indiferencia desmesurada. Esto se traduce en el hecho de que llegará el momento en que será muy tarde para nosotros y nuestra naturaleza por no darnos la oportunidad de cambiar y valorar los recursos que nos permiten vivir de la mejor manera. Como menciona Washington Novaes, uno de los periodistas que mejor sigue las cuestiones ecológicas en Brasil: «Ahora ya no se trata de cuidar del medio ambiente, sino de no sobrepasar los límites que podrán poner en peligro la vida». El escritor Leonardo Boff también sigue esta línea al decir: «el equilibrio entre la conservación del ambiente y la economía se rompió a favor del crecimiento hace bastante tiempo». Por eso, hay que reconocer cuando ya un negocio se convierte en un prejuicio para las personas. En fin, el punto es que «aún no es tarde para amar nuestra biodiversidad en general, nuestros ecosistemas, elementos y recursos. Estos nos muestran la necesidad de equilibrio y balance para poder subsistir, demostremos que nosotros, como seres humanos, somos capaces de razonar y actuar ya.
Costa Rica es considerada mundialmente entre los 17 mejores países cuando se trata del tema de la biodiversidad mundial. Biodiversidad es la variedad de los seres vivos que habitan en la Tierra (1). En este caso cuando se habla de la biodiversidad marina, el país cuenta con 589.000 km2, una longitud de costa de 210 km en el Caribe y 1.106 km en el Pacífico. De estos factores es de donde el pueblo costarricense saca la gran mayoría del turismo el cual nos beneficia económicamente y nos ayuda a protegerlo para su bienestar y mantenimiento de esas bellezas vivas. De los ecosistemas que marinos que más destacan en Costa Rica, está la Isla del Coco. La Isla del Coco tiene un 11% de endemismo, posee una abundante comunidad de peces endémicos, que representa el 17% de las 300 especies de peces que se han descrito en sus aguas. Sobresale también el arrecife de coral, con 32 especies diferentes. Al ser un gran motivo de investigación, el trabajo concentrado y sistemático de especialistas en ciertos grupos ha dado resultados impresionantes, tal es el caso de moluscos marinos para los cuales en 1983 existían registros de 118 especies y actualmente se conocen más de 600 especies. Entre los animales más destacados están el pez vela, manta raya gigante, tiburón ballena, tiburón martillo, león marino californiano, tortuga carey y la tortuga del Golfo. Entre sus plantas más reconocidas, están lycophyta, briofitas, Erythrina fusca y la Annona glabra. Entre otras de las ventajas pero a la vez desventaja de la biodiversidad marina, es la pesca. El sector pesquero costarricense tiene una gran importancia social y económica como fuente generadora de divisas, pero sobre todo por su contribución al empleo en áreas marginales y económicamente deprimidas como son las áreas costeras del país en general. Pero existen varias desventajas de la pesca; entre ellas están la pesca ilegal. La pesca ilegal ha matado aproximadamente a un 3% de los peces (el más afectado el tiburón por su aleta) en las costas marinas de la Isla del Coco en el 2009. También está la el descuido de los pescadores que a la vez contaminan el país y matan a varios animales, como la tortuga baula, la cual está en peligro de extinción por la venta ilegal de huevos y la matanza por de parte de varios pescadores (1CT). Costa Rica se ve afectada por la contaminación y la matanza de sus especies tanto de animales y plantas marinas, pero existen varias defensas humanitarias que nos ayuda a defenderlos (2CT). Entre ellos, están los parques nacionales y organizaciones. Entre las organizaciones más importantes están: Fondo de Conservación de Costa Rica, INBIO, Programa de Conservación de Tortugas Marinas de Osa, Costa Rica y el Centro de Rescate y Rehabilitación de Animales Marinos. Entre los parques más destacados, están: Parque Nacional de Santa Rosa, Parque Nacional Marino Las Baulas, Parque Nacional Manuel Antonio y el Parque Nacional Cahuita. Todos estos centros nos ayudan a mantener la vida costera, además de que el marco legal para la conservación y uso sostenible de la biodiversidad es muy amplio en el país (3CT). Costa Rica tiene que tener en cuenta que la vida marina es de los temas más importantes para la conservación del ecosistema costarricense. El pueblo costarricense los tiene bien cuidados, pero con el progreso humano y los problemas tanto económicos, sociales, ambientales como espirituales de hoy en día ponen a nuestra tierra en riesgo de perder todas esas bellezas naturales y vivas. CATEGORIA 16 a 18 años – español
La biodiversidad como tal, dentro de un ambiente marino costero, es un tema muy amplio para poder explicarlo completamente con tan solo setecientas y resto palabras. Acerca de este tema, existe una importante cantidad de datos, recopilados por muchos investigadores. Sin embargo, los de más relevancia están dirigidos a la protección de estos ambientes. Con el fin de seguir desarrollando el tema, es primordial explicar antes unos conceptos. El primer concepto es “biodiversidad” o diversidad de vida. Se entiende por biodiversidad a la cantidad de especies en una zona determinada o más específicamente el número de especies distintas que habitan en una zona, se relacionan entre sí y con el medio. Otro concepto muy importante es “ambiente”; ¿qué es ambiente? Cualquier persona respondería a esta pregunta de la siguiente manera: “El ambiente es lo que se encuentra a nuestro alrededor” o “Ambiente es la naturaleza”. Pero la definición de ambiente va más allá de esto. Dichas frases se quedan cortas si las comparamos a la definición de ambiente. Siendo más concretos ambiente se refiere a lo abiótico (atmósfera, suelo, clima, biotopo) y a lo biótico que se relaciona directamente con la vida. Además, este concepto no aísla a las dos partes, más bien las une entre sí. Por ejemplo, una especie vive en un determinado lugar y se relaciona con las demás especies que también lo habitan. Un último concepto, pero no menos importante que los anteriores, es “marino costero”; al escuchar esta frase, se nos viene directamente al pensamiento el mar; sin embargo, no es exactamente a lo que la frase se refiere. La zona marino costera es el límite entre la costa y mar adentro. Es un lugar muy afectado por las corrientes y los cambios de temperatura del medio, por lo que es muy sensible. Por sus características, la zona marino costera es un lugar ideal para la vida marina ya que brinda refugio y alimento. Gracias estas cualidades, son lugares con numerosas poblaciones de especies marinas. Conociendo los anteriores conceptos, es más fácil comprender el tema, que en resumen sería la diversidad de especies que viven en el límite entre la costa y mar adentro. Ahora que ya se ha explicado brevemente a qué nos referimos, podemos detallar un poco más el tema e inclusive su problemática. La zona marino costera, como antes se mencionó, es un lugar muy exótico que brinda los recursos necesarios para la vida marina; además, es un lugar muy sensible que puede cambiar sus características. Miles de especies viven allí, especies con necesidades específicas, que sólo pueden ser satisfechas allí. Un buen ejemplo de esta diversidad de especies se da en las partes más cercanas al ecuador o tropicales. Esta zona marino costera es el hogar de los corales, especie muy sensible a los cambios en la salinidad, luminosidad, oleaje y temperatura. Otra especie ejemplar son los crustáceos que se alimentan de los desechos arrastrados por la corriente hasta esta zona; además, utilizan el lugar como refugio natural. Otra especie y quizá la más reconocida son los peces, que los hay de todos los tamaños, colores y formas, que se alimentan y se refugian allí. Todas estas especies antes mencionadas son unas de las más reconocidas, pero hay más; unas de estas inclusive no han sido descubiertas aún y otras están en peligro de extinción o ya están extintas. Todo esto, debido, principalmente, a nuestro mal uso de los recursos naturales. La zona marino costera al encontrarse alrededor de todas las masas continentales, es muy explotada y difícil de proteger. Día con día, miles de individuos son extraídos de estos lugares para su comercialización; además de eso, la contaminación ha dañado estos ecosistemas, en perjuicio de las especies que ahí viven. La biodiversidad en los ambientes marino costeros es inmensa, pero también es inmensa la posibilidad de perderla por completo. Lo que los Gobiernos hagan para tratar de defenderla, es inútil si no hay un cambio en nuestra sociedad. El preservar este inmenso patrimonio de la humanidad es obligación de cada persona que habita este planeta.
Alto al exterminio de nuestra fauna marina… Hablamos sobre los recursos naturales Las cosas que estimulan nuestro espíritu son intangibles: George B. Schaller El ser humano no hace conciencia sobre la situación del planeta. La contaminación de aguas está llegando a un caos. El exterminio de nuestra flora marina nos causa indignación. Debemos tomar medidas acerca de lo que está sucediendo. Las instituciones encargadas del medio ambiente deben crear políticas para proteger el medio. La belleza del nuestro planeta está precisamente concentrada no solo en el espacio terrestre, sino en la fauna marina. Si no tomamos las medidas pertinentes, naufragaremos en un mar de angustia. La conciencia del ser humano está siendo violentada por la parte material; no se da cuenta del gran daño que está ocasionando a los seres vivos y a la humanidad en sí. Es interesante ver como podemos captar el gran adagio del latín: “Homini lupus homini”, donde se nos manifiesta el hombre lobo del hombre. Es inaudito observar como los seres humanos nos destruimos a nosotros mismos. En lugar de interpretar nuestra vida en la tierra como lo más valioso que poseemos, se percibe, no sé si consciente o inconscientemente, como el lugar que de manera paulatina tenemos que exterminar. Es impresionante cómo las aguas están siendo contaminadas por la mano indiscriminada del hombre; vemos todos los días en los noticieros, informes por medio de las redes sociales, la destrucción de la flora marina, las ballenas, los delfines, las tortugas y toda variedad de peces que son el gran atractivo del paisaje y de los mares. Me pregunto cuál es el objetivo de toda esta acción generada por algunos individuos y no tengo una respuesta clara en mi mente. El exterminio de nuestra flora marina nos causa gran indignación y ahora me hago una segunda interrogante: ¿Por qué estas personas que están destruyendo nuestra flora marina en forma indiscriminada lo siguen haciendo y no reciben ningún castigo de la humanidad ni de leyes gubernamentales? ¿Será que los seres vivos en este siglo que vivimos no tienen quién los defienda? Eso nos causa aún más amargura y nos hace sentir impotentes ante esta situación planteada. El ser humano en estos casos me hace recordar la frase de Johnny Keeling: “El animal más peligroso que conozco es el hombre”. Cabe recalcar el papel que deben tener las instituciones del Estado en defensa de nuestra flora marina. Es impresionante ver como por dinero son alteradas las leyes establecidas para proteger nuestros mares; en todo caso, aquí empieza a ser más importante la parte remunerada de las grandes empresas hoteleras que la vida de nuestros mares. Ahora ni siquiera los estudios de impacto ambiental son tan relevantes porque por dinero hasta eso se compra, con tal de crear grandes complejos hoteleros. La belleza del nuestro planeta está precisamente concentrada no solo en el espacio terrestre. Analicemos e interioricemos la belleza de nuestros fondos marinos, esos hermosos arrecifes de colores, formando un impresionante caleidoscopio, donde la vida se manifiesta en múltiples colores y armonías; esas grandes creaciones de la naturaleza como las ballenas que al parecer son invencibles, pero el hombre con sus grandes inventos de destrucción se siente más grandes que ellas; tan grande que se cree, y que tan pequeño y miserable es. Solo miremos los delfines, animales amigables, hermosos, cautivadores. Hay países en donde los consumen para carne. Es impresionante ver la matanza de delfines en lugares de grandes conglomerados; es sencillamente indignante que estos seres estén desapareciendo del planeta por la mano asesina y descuidada de seres irracionales. Si no tomamos las medidas necesarias, naufragaremos en un mar de llanto y angustia porque nuestra vida marina desaparecerá, las nuevas generaciones nunca conocerán nuestras especies a no ser de un milagro evolutivo de algún científico el cual pueda crear la vida. Recordemos la frase de Albert Einstein:”Solo dos cosas son infinitas, el universo y la estupidez humana y yo no estoy seguro de lo primero”…
Antes de poder hablar acerca de un tema tan amplio como la biodiversidad, tenemos que tener muy claro este concepto. Al definirlo, se puede empezar por decir que es el término mediante el cual se hace referencia a la amplia variedad de seres vivos sobre la Tierra y los patrones naturales que la conforman. Nuestro planeta es un sistema completo, el cual nos brinda condiciones perfectas para la supervivencia de los que la habitan. Éste cuenta con numerosas maravillas que son sorprendentes al ojo humano. Un ejemplo es la región en que se asienta México, que al localizarse entre dos grandes regiones climáticas donde convergen corrientes marinas cálidas y frías, le permite el intercambio de elementos de origen boreal y tropical, que dan como resultado una gran variedad de climas y ecosistemas. Entre estos últimos, se pueden destacar principalmente los lagunares, playas, dunas, bahías, manglares, marismas, salitrales, humedales, praderas de pastos marinos, arrecifes coralinos y lagunas costeras, que son, en conjunto, un verdadero paraíso. Ahora bien, es lamentable que conociendo que los recursos biológicos y otros recursos naturales son el motor de este planeta, estemos atacando a nuestro hermoso hogar de la manera en que lo estamos haciendo. En la actualidad, el mundo completo afronta catástrofes; podemos mencionar así la más reciente: el grave derrame de petróleo en el golfo de México, que ocasionó la muerte de gran cantidad de seres vivos y contaminación de las costas. Si analizamos en profundidad el problema, podemos darnos cuenta de que los únicos culpables son los seres humanos ya que aunque nuestras costas están colmadas de numerosas especies, poco a poco vamos acabando con muchas de estas. Los arrecifes del planeta entero están sufriendo las consecuencias, ya que estos, debido al aumento en la temperatura del agua, están bajo mucho estrés, pierden las algas de sus tejidos y mueren. Además, la eliminación de la cubierta vegetal, relleno de humedales, generación de aguas residuales y residuos sólidos, están acabando con la biodiversidad en nuestros ambientes costeros. Al pensar en soluciones, podemos nombrar muchas. El problema es llevarlas a cabo. Lo mejor es empezar con nosotros mismos, los costarricenses, ya que si logramos cambiar el pensamiento y minimizar los problemas en nuestro país, se tiene la esperanza de que de lo pequeño se llegue a lo grande, y así se logre cambiar el pensamiento sobre las especies que habitan nuestras zonas costeras y por consiguiente las del mundo entero, de manera que consideremos su gran importancia. Costa Rica es un país bendecido con gran cantidad de recursos naturales, ya que al estar rodeado por costas, es el hogar de numerosas especies marinas. Últimamente, se ha demostrado que nuestra población necesita una seria concientización acerca de estos recursos, ya que problemas como la pesca ilegal, la expansión del turismo y la contaminación de las tierras interiores y la costa, han puesto a las zonas marinas bajo fuerte presión. Diferentes organizaciones están dando apoyo para la recuperación de zonas en peligro y la expansión de zonas de pesca de una manera responsable; es así como se pretende, mediante algunas de estas, lograr la recuperación poco a poco de la biodiversidad de zonas marítimas, que siempre ha caracterizado nuestro país. En fin, el país y el planeta entero cuentan con una maravillosa cantidad de especies marinas, y está en nosotros el mantener el equilibrio y no seguir acabando con ellas. En definitiva, la mejor medida de protección que se puede implementar es la concientización en nuestra población sobre la importancia que representa mantener la biodiversidad de estas especies marinas en las costas del mundo entero. No permitamos que la destrucción de nuestro propio hogar sea por causa de nuestras manos. |
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La biodiversidad en ambientes marino costeros
Primer lugar 13 a 15
Segundo lugar 13 a 15
Tercer lugar 13 a 15
Mención honorífica 13 a 15
Primer lugar 16 a 18
Segundo lugar 16 a 18
Tercer lugar 16 a 18|
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Ensayos ganadores en inglés CATEGORÍA 13 a 15 años
A large amount of Costa Ricans do not know that Costa Rica’s marine territory is 10 times bigger than its inland area. They also ignore the fact that our seas are home of approximately 6.777 different species: a 3.5 percent of the world’s known species. Costa Rica, with its only 51.100 km2 of terrestrial land (0.03 of world’s inland area) and 589.000 km2 of sea territory, is considered one of the 20 countries with higher biodiversity worldwide. Even though we are privileged for having such large biodiversity, a big part of it is in danger for many reasons, including natural and human threats. Environment protection initiatives and programs have highly contributed in preserving wildlife but there are still many goals to reach. The deteriorated condition of our coasts, mangrove and river mouths is deeply connected to human activities. One example is river poisoning. In order to get shrimp and fish, people poison a part of the river. Before ending up in the sea, these chemicals pollute the whole river and kill lots of wildlife. This practice usually takes place in rural villages were people affirm to ignore the effects this practice has on nature. Solid wastes contamination occurs mainly in our Central Valley’s rivers, a well known problem that only seems to raise concern among environmental groups. The contamination of these rivers ends up contaminating many others. For example, the Virilla River (Costa Rica’s most contaminated river of all) connects with many others that join the Tarcoles River (famous for being home to a lot of crocodiles). In fact, it is scientifically proven that contamination leaves crocodiles blind, just to mention some part of the whole trouble. Poor residual water treatment is also another issue. In inland areas, residual water treatment is easier, whether using a septic tank or oxidation lagoons. Unfortunately, in most coastal areas, since there is no infrastructure for water treatment, water waste often ends up in wetlands or at the sea. Costa Rica’s wetlands cover close to 7% of the territory, a relevant issue nationally and internationally, mainly because of the increasing threats against these ecosystems. Ten Costa Rica’s wetlands have been declarated Ramsar Sites (World Important Wetland). Three of them are a Natural Reserve and one of them is a National Park. The rest remains unprotected… Our Pacific and Caribbean coasts present a large variety of corals: Cahuita, Isla del Caño, Golfo Dulce and Isla del Coco are a few of the sites for coral. Isla del Coco presents more than 393 marine species including different species of marine birds, fish and corals. With only 1306 km of coast (1106 in the Pacific and 210 in the Caribbean) Costa Rica’s marine wildlife is large and diverse. Our country is also pioneer in conservancy, which makes me think about how threatened marine biodiversity may be in other places of the world. We all enjoy visiting the beach or snorkeling. Let’s work together to permit our future generations to do it too.
The word illusion refers us something unreal, something that we see right before us but will vanish eventually. Since the beginning of history, Costa Rica has been known as one of the most beautiful paradises in the Caribbean. It takes glory on its mountains, rivers, forests and beaches due to the variety and diversity of animal and plant species. Its unique habitats are capable of sustaining incredible marine species, such as the baula turtle, hammerhead shark, and hundreds of coral classes at the gorgeous ecosystems, like Tortuguero, Coco Island, Las Baulas National Park and Gandoca-Manzanillo Wildlife Reserve . However, this amazing paradise is constantly being threatened and damaged by human beings and their many activities which, most of time, harm the natural resources without caring enough to clean up the mess they do to the environment. These activities, that cause environmental problems, often take place when we think that we are economically improving a specific area by bringing progress to it. Unfortunately, those actions cause several harmful effects to the environment. When we build luxurious hotels and houses near the beaches, we often cut trees down without analyzing the damage the zone takes. To make things worse, not even half of the trees lost in construction and housing projects is ever restored. We also drain the ponds and swamps near these areas, killing high amounts of wildlife. Trying to bring progress to the rural zones near the beaches isn’t necessarily a bad thing; it could be a good thing for our society if it is done in a conscious way and keeping optimal balance with nature. The problem that comes is that people are often too greedy and the only thoughts they have in mind are those of obtaining money and power. Thus, they disrespect laws, kill animals and don’t even take responsibility for their acts. Under this growing menace, the paradise that once belonged to us is crumbling from its roots and could come down crashing over us at any moment. I believe we can restore part of the damage our seas and swamps has suffered and keep new catastrophes from happening again. To do this, a conscious change must be generated in the education children receive, not only in school but also at home. So that they are able to learn about how much the environment is suffering and how to do their part in building a balanced country. We could even change the history in many parts of the world by conserving and enjoying the natural wonders our oasis of life offers us. But as long as this unbalanced atmosphere continues to exist, and our abundant wildlife is threatened by our own blindness, our paradise should be considered only as an illusion: although we are able to see it today, it may not be there tomorrow. CATEGORIA 16 a 18 años – inglés
Costa Rica has been blessed with two coastal areas: the Atlantic and the Pacific ones. Coastal-marine environments are part of the many riches this country has. Those two areas, -that serve as the homeland of 3,5% of the marine species of the world: an uncountable number of fish, algae, marine mammals, reptiles, amphibians; as well as the coral reef zone that gives shelter to lots of different species-, serve to maintain the balance of the marine environment. These areas provide a great number of benefits: scenic beauty, food for marine species and humans, and permanent income from tourism. Coastal and marine biodiversity is not only important for the sustainability of the environment itself as supplier of shelter, food and breeding areas for a huge flora and fauna; it also means a source of progress for the country in many ways. The economic activities carried out in marine and coastal regions are of great importance for the development of the communities along the shore, the sustainability of many people all around the mainland who consume marine products, and the projection of the country in relation to the scenic beauty and enjoyment they give to visitors from other latitudes. However, it is sad to realize that much of the coastal marine biodiversity has been threatened because of the environmental decline caused by factors such as overexploitation, pollution, poor government action over coastal and marine regions, and the rapid urbanization of coastlines. These issues turn to be an aspect to be analyzed urgently: who should be blamed on those? Who should be in charge of making a change? The answer to these questions is clear, everybody should: the government, the private companies, and the people in general. That is, every single person must be aware of and interested in protecting coastal-marine regions and their biodiversity for their current and future well being. Even though, the previous idea may sound challenging, it is not an impossible task. First, a good educational strategy involving media and schools is a priority. Second, sustainable strategies for using and safeguarding these regions and the resources they provide are an urgent need. Finally, more control over the urbanization of the coastal areas, and a better understanding of how to integrate population issues into coastal management should be considered. All these actions are the best way to save our coastal-marine environments and their biodiversity. It is a fact that all people need to take action to preserve them; we all deserve to keep enjoying such wonderful gift nature has given to humanity.
Below the surface of the sea, a tiny animal is pulled by the tides. It drifts toward a group of scuba divers, getting really closer to one of the swimmers. The tiny creature passes by the relaxed man just a few centimeters away. That man never noticed how close he was to death: that tiny one-cubic-centimeter creature was the irukandji jellyfish, one of the most poisonous animals on Earth. Under those swimmers, the Great Barrier Reef extends from the Torres Strait to the Fraser Islands, covering a full 2600 kilometers. A hammerhead turns its powerful body and charges a stingray; its jaws get a hold and a few tumultuous seconds later, a gorged shark leaves the misty red waters. Pieces of meat tumble down and the cleaner wrasses that trail the shark fed on them. Even deeper, where the sunlight no longer reaches, fish make their own. Enclosed underneath their skin, light producing bacteria glow. When their unsuspecting prey approaches the organic lure, the predator snaps it up. Evolution pulls no punches. On the opposite hemisphere, a small Central American country has more territory in the oceans than on land. Thanks to its access to the Atlantic and Pacific, that country: -Costa Rica- hosts an incredible 3,5% of the world´s aquatic species. Just at Isla del Coco one can find 27 separate types of sharks. The terrestrial beings, humans, have little knowledge of this. They only inhabit the shores, and rarely explore under the first few meters. At the very bottom of the ocean, beneath even the ground, lie their main interests: oil, minerals, natural gas. Across the top, between the choppy waves and occasional flotsam, is the transoceanic highway. Huge freighters carry people and cargo back and forth to separate continents. Between these two areas, the cubed kilometers of water and life might as well do not exist at all. Animals, numbering in the thousands, are the ghosts of another world; one that doesn’t involve people: a world that is at the mercy of the tides and moon, a world that can weather a hurricane unscathed, a world that is aside from beaches, a world that is isolated from the continental masses. Despite sharing the same planet, and even dominating it, oceans are a great unknown. The last frontier, the edge of the world, or whichever other phrase you prefer. Involved in their own lives, people see them as a means: transport and material; a great underwater stash to exploit and manipulate as they see fit. For most of human existence, these oceanic inhabitants haven´t been affected much by their indifference toward them. While people stayed on land, rowed flimsy canoes and limited themselves to hunting with old-fashioned harpoons. No harm has been done; at least, no harm that could last. While the sea remained unchanged, as for millions of years, people evolved, invented, and conquered. The canoes became drilling platforms; the harpoons industrial strength nets. These in turn spilled oil and blood in equal measure. Now the marvelous aquatic life, -almost invisible in human terms-, is disappearing in earnest.
The biodiversity is known as the range of organisms present in a particular community or system that can be measured by both the amount and types of species, as well as the genetic variations among those species. Additionally, the marine coastal environment is closely associated with the concept of biodiversity because it refers to the species and their varieties near the shores and sea that are in direct contact and produce a system of life which generates the formation of an aquatic ecosystem. Our country is classified as one of the most important places with a great diversity around the world. In fact, if Charles Darwin had seen the wonderful natural riches of Costa Rica, he would probably have written his book On the Origin of Species based on our territory. The marine coastal environment in our nation is enormously diverse in flora and fauna. It comprises a total of 6 778 species, about 3.5% of all marine species reported worldwide. From these species, a total of 4 745 of them are present from the Pacific Shores to the Caribbean. People can find more than twenty species of large marine mammals, like dolphins and whales, in Costa Rican waters depending the time of the migratory season. Without any doubt, Costa Rican coasts provide valuable sightseeing areas for marine wildlife. The advantages of the biodiversity in these areas include the great amount of animals, plants and excellent tourist sources all over the country. Many foreign people come to our country in search of the best contact with the wildlife, an activity that supports the economy of the Costa Rican people. Unfortunately, our biodiversity has been affected by the mankind’s terrible actions: coasts have been polluted, animals have been killed and vegetation has been destroyed. Up to now, many people do not care about the damage that are doing to the natural environment. On these days, videos on the web are showing the reality that Costa Rica has. It is really sad to notice how the fishermen kill sharks, how turtles have been affected by the construction of hotels and how fish and other sea animals die everyday because of the garbage thrown. The solution is definitively in our hands since we are the only ones who can stop damaging the coasts. The main step to find a solution is taking the responsibility of our actions, educating future generations, and making people realize how beautiful our natural riches are and how important it is to preserve them. Biodiversidad y recursos marino-costeros Mención especial, categoría extranjera, 18 años
México es un país que por tener tanta cercanía con los mares posee una gran cantidad de costas, en las que se encuentran áreas especificas que tienen una gran cantidad de especies diferentes y valor para la humanidad; por lo tanto, es necesario resaltar la necesidad que tenemos de conservar las reservas biológicas, previniendo cualquier tipo de daño que pueda ser causado por la invasión del hombre a estas. Las zonas más importantes en la biodiversidad marina en México son: el golfo de México, la península de Yucatán, el golfo de California y la zona del Pacifico tropical, situada frente a las costas del estado de Guerrero, donde está la falla de San Andrés. Una cosa que tienen en común todas estas zonas en las que la biodiversidad Marina es muy extensa es su profundidad; las zonas mencionadas anteriormente son zonas que a pesar de no tener una cantidad tan grande de biodiversidad, nos permiten disputar la victoria de ser el país con mayor densidad marina, tal es el caso del golfo de México, con 15 000 especies diferentes en solamente 1,5 millones de kilómetros cuadrados [1]. En México las zonas de mayor biodiversidad son el golfo de California y el golfo de México; estas dos son de vital importancia para la vida acuífera de México. El golfo de California es una zona que se ubica desde la península de Baja California, hasta los estados de Sonora y Sinaloa, al noroeste de México; su extensión es de 1 500 kilómetros hacia el sur y cubre una superficie total de 800 000 kilómetros cuadrados [2]. Cabe resaltar que el golfo de California tiene un clima subtropical, lo cual genera que tenga muchas variaciones climáticas. Este ecosistema marino es uno de los lugares más importantes para la pesca en el país. Su parte más profunda llega a alcanzar los 3 kilómetros de profundidad. El 15 de julio de 2005, el golfo de California fue declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad, en la categoría de bienes naturales, debido a su biodiversidad, de manera que se ha convertido en uno de los sitios turísticos más importantes de México, en razón de sus formaciones rocosas singulares y la presencia de diferentes tipos de ballenas que llegan a él cada inicio de año. La zona del golfo de California alberga poco menos del 40% de las especies de mamíferos marinos que existen en todo el mundo, además de ser el único sitio en el mundo en donde existen cascadas submarinas de arena. En la región se encuentran 244 islas e islotes; contiene además 4500 especies conocidas de invertebrados marinos. Un gran peligro para el golfo de California lo representa la invasión que el hombre ha hecho de este. Según el Instituto Nacional de Ecología, los deterioros han sido causados por pesca y acuacultura 39%; contaminación en un 26%; humedad en un 13%, áreas protegidas 6%; uso de zona costera 10%, y azolvamientos en un 6%. Por otra parte, el golfo de México se sitúa entre las costas de México, el noroeste de Cuba y la costa sur de Estados Unidos de América; esta es una cuenca semicerrada que se comunica al mar Caribe y al océano Atlántico; tiene conexión con más de 27 grandes sistemas, estuarios, bahías y lagunas costeras que sirve de áreas de refugio, reproducción y alimentación de numerosas especies marinas. Además de ser una de las zonas con mayor densidad en la biodiversidad marina, el golfo de México es una de las zonas con mayor peligro para las especies que subsisten en él; esto, debido a la contaminación y sobreexplotación de los recursos que de él se obtienen, lo cual ha generado una serie de cambios ambientales que han afectado a todo el país, así como la destrucción de los hábitats naturales. El golfo de México alberga grandes cantidades de las riquezas biológicas más importantes del mundo, y es de vital importancia para la economía del país. Por eso, es necesario hacer un llamado al pueblo mexicano para poner en marcha planes de protección de zonas ambientales y para poner los medios dentro de nuestros recursos, a fin de que estos no se vean afectados, ni por nuestra causa, ni por accidentes que puedan ocurrir dentro de estos como el pasado derrame de petróleo que se ocasionó en el golfo de México. [1] Según el Censo de Vida Marina. [2] Según la WWF “http://www.wwf.org.mx”
¡Felicitamos a los ganadores, sus educadores y familias!
Agradecemos a los coorganizadores y patrocinadores que nos han respaldado en esta décimo segunda edición del Certamen Nacional de Ensayo Científico. ORGANIZADORES
PATROCINADORES
Este programa es respaldado por el Fondo de Incentivos, Ley de Promoción del Desarrollo Científico y Tecnológico #7169. VISITE LOS ÁLBUMES DE FOTOS Y LAS PUBLICACIONES ANTERIORES
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Primer lugar 13 a 15
Segundo lugar 13 a 15
Primer lugar 16 a 18
Segundo lugar 16 a 18
Tercer lugar 16 a 18
La invasión del hombre a las reservas naturales marítimas
