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Ensayos ganadores del 2006
En la premiación del octavo año del concurso, se reunieron los jóvenes ganadores de varios programas de promoción del conocimiento científico y tecnológico del período. Además de los autores de los ensayos, estuvieron los primeros lugares en las olimpiadas de química y de física, algunos de los cuales viajaron al exterior y recibieron reconocimientos internacionales. El concurso de este período fue dedicado a la Química y contó con una serie de recursos digitales disponibles en la web, materiales promocionales distribuidos a cada colegio del país y una campaña en Radio U (101.9FM). Como resultado, se recibieron más de mil quinientas consultas diarias a las diferentes páginas web de respaldo, se realizaron talleres sobre la enseñanza de la química para educadores, se distribuyeron materiales en “Agosto, mes de la Ciencia en Costa Rica” y , finalmente, participaron jóvenes de casi todas las provincias del país. Como en años anteriores, los trabajos fueron recibidos por medio de la internet, esta vez en el mes de setiembre. La evaluación se llevó a cabo en cuatro etapas. (1) La totalidad de los ensayos fue revisado respecto de los lineamientos principales. En ese primer filtro se quedaron los trabajos incompletos y los que sobrepasaron la extensión máxima. (2) Una segunda revisión y selección semifinalista fue elaborada por una filóloga de vasta experiencia y miembro del jurado en certámenes anteriores. (3) Como tercer paso, se reunió al jurado ad honorem, que seleccionó a los finalistas. (4) Por último, se convocó a estos jóvenes el mismo día de la premiación para que escribieran otro ensayo y el jurado lo utilizó para validar sus capacidades. Por su valor, los ensayos de validación con el tema “Mi fin de semana ideal“ están incluidos como documentos descargables (pdf), junto a los ganadores. A continuación, los finalistas. CATEGORÍA MENOR
Primer lugar, categoría menor:
¿Qué es la Química? La Química es una ciencia que estudia a la materia que compone nuestro Universo. Estudia su composición, su estructura, sus propiedades y sus diferentes transformaciones. Es una de las ciencias fundamentales para comprender el mundo material y, sin duda, una de las que conlleva más aplicaciones prácticas. La Química estuvo presente en la gran explosión del “Big Bang”. Una explosión en la que se crearon el Universo y los planetas, dando origen a millones de maravillosas galaxias, como si respondieran a un mandato divino. Al formarse nuestro mundo, los elementos existían aun cuando no existía ni siquiera la primera célula. Pasaron millones de años para que se dieran las condiciones adecuadas y necesarias para que una fuerza especial uniera a los átomos, y para que estos a su vez formaran grandes moléculas; y los elementos se mezclaran para formar los compuestos, todo esto solo para que en el momento preciso, en un pequeño rincón de nuestro mundo, se creara la primera célula que diera vida a todo lo demás. Esa fuerza especial es la Química. He ahí el por qué un poquito de química hace una gran diferencia. Cuando nos adentramos en el sorprendente mundo de la Química, ya sea estudiando sus compuestos o aprendiendo sus fórmulas, estamos comprendiendo mejor nuestro entorno y la totalidad de nuestro Universo. Sin que nos demos cuenta, a nuestro alrededor en todo momento se están desarrollando miles de millones de procesos químicos, incluso en nuestra propia existencia y quehacer cotidiano como seres vivos. Con el simple hecho de hacer un refresco de diversas frutas, estamos haciendo una mezcla; al tomar agua, bebemos el disolvente universal y respiramos un elemento: el oxígeno. La Química se hace presente en la fermentación de una fruta o en la oxidación de algún objeto. Nuestro propio cuerpo es un laboratorio, porque en él ocurren muchísimos procesos químicos, como, por ejemplo, la digestión, la purificación de la sangre y la respiración. La fotosíntesis en sí, es un proceso químico que le sirve a las plantas para producir su alimento. Estos son unos cuantos ejemplos del sinfín de procesos químicos que ocurren en nuestra vida diaria. Al igual que todas las ciencias, la Química se debe usar con responsabilidad y adecuadamente. De no ser así, podemos crear desastres muy grandes y hasta fatales para nosotros y la humanidad entera. Ya se obtuvo una muy mala y terrible experiencia con la bomba atómica que causó y sigue causando muchísimo daño y temor. Las bombas lanzadas en las ciudades de Hiroshima y Nagasaki dejaron miles de víctimas fatales y también a miles de personas con cáncer, malformaciones y secuelas psicológicas. Otro mal uso de esta ciencia se puede ejemplificar con las armas químicas que se utilizan en las guerras, pueden dejar heridos y matar a muchísimas personas. Otras graves consecuencias de este uso irresponsable es el rompimiento de la capa de ozono, debido a los clorofluorocarbonos que sueltan los aerosoles y la contaminación. Pero, por otra parte, la Química puede hacer la gran diferencia para que nuestro mundo sea cada vez mejor y nosotros, los seres humanos, tengamos una mejor calidad de vida. Se descubren a cada momento nuevos medicamentos para curar enfermedades, materiales más resistentes y se desarrollan combustibles que pueden ser de menor costo y menos contaminantes. En conclusión, no debemos dar un mal empleo a la Química porque podemos traer muchas desgracias para la humanidad. Si damos un buen uso a esta maravillosa y apasionante ciencia, siguiendo los pasos de grandes maestros costarricenses como lo son Clorito Picado y Gil Chaverri, podemos obtener incontables beneficios. Porque siempre un poquito de Química hace una gran diferencia.
Segundo lugar, categoría menor:
Yo soy el menor de mi familia. Siempre había escuchado a mis hermanos hablar sobre Química. Yo era pequeño y nunca me detuve a preguntar sobre esta curiosa palabra. Ahora ya crecí y mi curiosidad sobre esta ciencia aumentó. ¿Qué es la Química? Hablaban sobre los compuestos y las mezclas, sobre la nomenclatura y los símbolos, sobre las uniones de unos átomos con otros. Yo los escuchaba decir cosas sobre la tabla periódica. Esta es muy importante en la Química, ya que esta ciencia estudia la composición de los materiales o elementos que existen. No siempre la tabla periódica ha sido como es ahora. Al igual que todo conocimiento humano, ha ido cambiando. Nuevos elementos se han ido descubriendo. El ser humano es un ser curioso por naturaleza. Desde que en los tiempos primitivos observaba el rayo, y luego obtuvo el fuego, la madera ardiendo, se preguntaba ¿por qué ocurre esto? El conocimiento sobre su mundo iba creciendo y sus formas de actuar le permitieron desarrollar su inteligencia hasta que logró por fin, en 1869, desarrollar un esquema ordenado de los elementos que se habían descubierto en ese entonces. Dmitri Mendeléiev, el genio de esta tabla, supuso correctamente que hacían falta elementos por descubrir, así que publicó una segunda tabla en 1869. En esta segunda tabla, dejó algunos espacios para los elementos que faltaban. Luego se descubrieron tres de estos elementos. La Química es una ciencia maravillosa. Justo ayer estuve cocinando. Recordé cuando me enseñaron en la escuela sobre los cambios físicos y químicos. Estuve pensando que sería este tipo de cambio. Después reflexioné en todos los cambios químicos, además del cocinar, que ocurren en nuestro típico día. Nosotros nos levantamos. Al desayunar, ingerimos alimentos que funcionan como combustible para nuestro cuerpo. Estos alimentos pueden ser útiles solo gracias a los cambios químicos que el cuerpo hace que sufran. Luego, viajamos en carro o autobús a nuestra institución o nuestro trabajo. Estos medios de transporte necesitan de un cambio químico para movilizarse. ¿Qué pasaría sin la Química en estos casos? Simplemente, la Química no se puede quitar de nuestras vidas. Es algo que no podemos dejar a un lado. ¿Cómo quitarnos el corazón y seguir viviendo? Sería lo mismo intentar hacer la Química a un lado. Nuestro cuerpo funciona por medio de reacciones químicas. Incluso cuando pensamos en el amor: sin la química no tendríamos esta maravillosa emoción. El cuerpo humano es capaz de tener esta maravillosa experiencia gracias a las feromonas. Si, la Química nos ayuda mucho. Todos tenemos algún conocimiento sobre esto, pero existen otras personas que estudiaron esta ciencia a fondo y ahora elaboran medicinas para ayudar a nuestro cuerpo a defenderse de cuerpos extraños que entran en este para causarnos enfermedades. Las ciencias no han sido absolutamente buenas para la humanidad. Al igual que otras, la Química ha causado daños a este planeta. Sin embargo, la Química no puede hacer daño por sí misma. Existen personas que no sabían que sus acciones causarían daño. Ahora podemos aprender de estos errores. Sabemos que hay que tratar con precaución todos los experimentos. Si se causó un daño por medio de esta ciencia, podemos repararlo con la misma Química. La Química por siempre nos ayudará.
Tercer lugar, categoría menor:
Del Diccionario de la Real Academia Española obtenemos la siguiente definición de qué es la química: “Ciencia que estudia la estructura, propiedades y transformaciones de la materia a partir de su composición atómica”. Es esta la definición desarrollada en este ensayo. La química estudia estructura de la materia: esto se refiere a la búsqueda del ser humano de saber qué somos, en un sentido físico; pero esta curiosidad humana lleva más lejos, donde buscamos saber cómo están formados los cuerpos de todo el Universo. La química también estudia las propiedades de la materia. En un uso más pragmático de esta definición, el ser humano utiliza el estudio de esas propiedades para su propio beneficio, facilitándose a sí mismo la vida, mediante el desarrollo de la tecnología. Además, la química estudia las transformaciones de la materia, de este modo, alimenta sus necesidades de saber “¿qué sucedería si…?” o “si esto hubiera pasado en otras circunstancias…”. En esta área podríamos ubicar las reacciones químicas, como análisis del comportamiento de las sustancias durante sus transformaciones. Ahora bien, estas tres áreas de estudio de la química nos recuerdan los progresos de un niño pequeño al conocer un objeto nuevo: utilizando sus sentidos estudia su forma, después lo caracteriza y por último juega con él (el uso recién descubierto por el niño, no necesariamente el dado los adultos), para conocerlo de una forma más integral. En el campo de la química siempre hay situaciones nuevas por descubrir: este proceso de pensamiento (el cual para los mayores, bien mejorado, sería el Método Científico) se da constantemente. Todo este estudio difiere del ejemplo del niño en un aspecto fundamental: la química está basada en la composición atómica de la materia. A lo largo de la historia, se ha buscado conocer estas unidades, pero, lamentablemente, no hemos logrado verlas de alguna forma en la cual se les pueda analizar con suficiente detalle. Hoy estamos rodeados de la química para la vida diaria. Son las aplicaciones de esta ciencia las permisoras de un desarrollo muy efectivo de las tareas diarias, aprovechando tantos materiales como la naturaleza pone a nuestra disposición. Este aprovechamiento práctico no es “sacado de la manga”: grandes hombres y mujeres de ciencia han sacrificado sus vidas para que disfrutemos de la comodidad actual de la cual gozamos. Se esforzaron durante años y años para lograr descubrimientos los cuales tal vez ahora parezcan, ante nuestros ignorantes ojos, nimiedades. Como joven, doy gracias a aquellas personas que entregaron sus conocimientos e investigaciones para bien de nosotros, los seres humanos del siglo XXI. Desde los alquimistas hasta los bioquímicos e ingenieros químicos; desde Leonardo da Vinci hasta el doctor Gil Chaverri y la doctora Jeannette Benavides; desde artesanos orfebres hasta investigadores para las distintas industrias; desde Demócrito hasta los actuales investigadores de los átomos. Agradezco, y a la vez acepto el reto que me impulsa, no sólo a estudiar la química, sino a ser un hombre de conocimientos científicos. Acepto el reto para trabajar en aras de los descubrimientos futuros y a ser parte del grupo entregado para el bienestar futuro y el descubrimiento de las ciencias de la naturaleza. CATEGORIA MAYOR
Primer lugar, categoría mayor:
Hoy tuve un sueño extraño; soñé que poco a poco las personas se fusionaban con el universo, y éste los absorbía en un mar de infinidades. ¿Acaso saben ustedes que significa eso? Sinceramente, al principio yo no lo sabía, pero bastó que abriera mis ojos y me diera cuenta de ello. Les voy a contar cómo he logrado interpretarlo: Lunes en la mañana, he despertado de ese confuso sueño, motivado a descubrir la razón de éste, siento la contextura sólida de mi cama formada por partículas fuertemente enlazadas entre sí, me dirijo al baño, hace frío, por lo que utilizo agua caliente, noto que al tocar el piso se evapora, y al hacer contacto con la pared; el vapor regresa al estado líquido. El jabón que utilizo al hacer fricción con mi piel y contacto con el agua produce espuma: un coloide (una línea intermedia entre las disoluciones y las mezclas groseras). Mi mamá me ha aplanchado la ropa, que antes estaba arrugada, pero gracias a que la temperatura produce la maleabilidad de ciertos materiales, mi uniforme está ahora sin arrugas. Mientras me estaba peinando, me di cuenta de que el gel que utilizo es otro coloide, y al hacer contacto con mi cabello, puedo peinarme como desee, y se endurece, al unir cada cabello. Desde mi habitación escucho el chasquido de los fósforos que utilizamos para producir fuego y así encender la cocina. ¿Pensarían los humanos prehistóricos que producir fuego en una época llegaría a ser tan fácil? El fuego ha sido de vital importancia para la producción de reacciones químicas, siendo hoy un instrumento cotidiano. Me han llamado a desayunar, pero la sartén estaba tan caliente y mi mamá tan ocupada que se ha olvidado apagar la cocina y se ha quemado mi desayuno, ha sufrido una reacción tanto química como física, ¡ven, cómo se los dije anteriormente, el fuego es de vital importancia para producir reacciones químicas! Afortunadamente, me han dado dinero para comprar algo, las monedas, estaban hechas por la aleación de ciertos metales. Tomo mi salveque y me dirijo a la pulpería, compro unas galletas, que no me gustaron porque tenían más colorantes, saborizantes y preservantes que sus mismos nutrientes, y un refresco el cual en su caja mencionaba que poseía un gran complejo vitamínico. Todos ellos tuvieron una serie de reacciones químicas en mi cuerpo que le proporcionaron la energía para continuar el día. Los automóviles van y vienen, y así como a mi cuerpo el alimento le proporciona energía, los hidrocarburos se la proporcionan a ciertos medios de transporte. He llegado al colegio, me reciben mis compañeros(as), siempre tan amables, unidos y de buen humor; esto me motiva a creer que también hay química en nosotros. Clases de química, la profesora ha colgado una gran Tabla Periódica de los Elementos en la pizarra, que decía: arreglo de Gil Chaverri; este es un gran científico costarricense, un ejemplo de esfuerzo y la capacidad de los costarricenses para desenvolverse en el campo científico. Durante las clases, me di cuenta de que todo estaba formado por partículas muy pequeñas, indivisibles e indestructibles, que la química puede ser algo a favor (como la creación de medicamentos) o en contra del ser humano dependiendo de cómo éste la utilice (tal es el caso de las bombas nucleares). Varios elementos tenían diferentes nombres, como el curio que me recordaba a Marie y Pierre Curie, cuyos análisis de los elementos radiactivos contribuyó a la comprensión de los átomos en los que se basa la física nuclear moderna. Así transcurrieron 20 minutos de clases, poco tiempo relativo a todo lo que aprendí. ¿Qué estoy escuchando?... ¡Examen sorpresa!, dice la profesora, y aunque no me he preparado, creo que las experiencias que obtuve durante el día me son necesarias para entender los conceptos adquiridos y por adquirir. Ahora entienden el significado del sueño, la fusión con el universo, significa que formamos parte de la materia y el mar de infinidades representa la química, una inmensidad de conocimientos por adquirir. Creo que ahora me queda claro como un poquito de química está presente en nuestras vidas y como su conocimiento marca la diferencia, de no ser así, nosotros, junto con lo que he compartido con ustedes, no sería un ejemplo de ello.
Segundo lugar, categoría mayor:
La Química. ¡Saber antiguo y ciencia reciente! ¡Tan general pero a la vez tan específica!, como tiene la capacidad de abarcar tanto, sin dejar ni un hálito por fuera, y cómo escudriña profundamente, hasta revelar lo insólito e inimaginable. Si intentáramos definir la Química, sería como la vida y la muerte, lo falso y lo real, lo creíble e increíble. No se nos hace difícil comprenderla, ya que está relacionada con nuestra vida diaria. Es una ciencia sensible aun a lo inanimado, infinita en conocimientos y descubrimientos, llena de maravillas, que desborda de sentido nuestra existencia. ¿Acaso no se le atribuye a este saber las ocasiones que hemos formulado una hipótesis cotidiana? ¿O las reacciones que se producen dentro de nuestro ser cuando llega el amor? Dichosos los eruditos pioneros de este dogma, ya que probablemente no estaban rodeados de artefactos complejos o embrolladas teorías, pero, aun así, sabían que estaban delante de algo diferente, mas allá de sus intuiciones, de su imaginación, algo que se transferiría de generación a generación y, conforme fuere evolucionando, iba a afectar sutilmente el mundo entero y más allá de él. La Alquimia, sin lugar a dudas, fue uno de los mayores riesgos que un ser humano pudo haber ejercido. Se manifiesta como un esfuerzo del hombre por comprender y tratar de dominar su alrededor. El hecho de ser perseguidos, ser acusados de herejes y poner en peligro hasta sus vida, nos da a entender el añoro con el que guardaban cada uno de sus conocimientos. Tal vez como Demócrito, podríamos ser discípulos de la Química, y dejar que en el transcurso de nuestra existencia nos muestre cómo seguir sus pasos. ¿Qué sería de cada uno de nosotros sin la Química? Posiblemente, no tendríamos muchos de los regalos que hoy gozamos; si tan solo pudiéramos detener el tiempo y dejar las agobiantes preocupaciones que mantienen nuestros ojos vendados, para reconocer que hasta el más mínimo detalle que nos rodea está alterado por la Química, desde el dulce marchitar de una flor hasta el doloroso nacimiento de una criatura. ¡Cómo no reconocer la hermosura que hay en un contorno que, aunque grande, es relativamente pequeño! El hecho de observar las aplicaciones de la Química no me hace conocedor de ella. ¿Acaso un hijo conoce a su padre por medio de los presentes que reciba? Sin lugar a dudas, esto va más allá de lo que nuestros ojos puedan ver o lo que logremos entender: conocer la Química es ser perceptivo a ella. Este saber es el cimiento de muchas otras ciencias, tales como la Biología, Astronomía y Geología. ¡Y pensar que hasta las más bellas estalagmitas pasan por el “quirófano” de la Química! En la actualidad, la sociedad tiene la ventaja de poder contar con innumerables oportunidades para acercarse más a la Química y utilizarla como herramienta para su progreso, en especial los jóvenes, que se inician en estos conocimientos en la secundaria. Me parece que esta es una buena oportunidad para que los educadores y dirigentes del país provoquen en cada joven el nacimiento de un potencial científico que, probablemente, ni ellos mismos sepan que lo poseen. Es un gran orgullo nacional escuchar que cuatro jóvenes costarricenses pudieron hacer la diferencia, al destacarse internacionalmente en una Olimpiada Mundial de Química. ¿Quién dijo que desde Costa Rica no se exporta Química?. Somos un país desarrollado, con mentes y mercados exitosos. Al concluir, no se puede dejar de mencionar a todos aquellos alquimistas, científicos, profesores, sabios o simplemente seres humanos que probablemente han invertido la mayor parte de su vida amando esta ciencia y que han abierto el camino a los hombres y mujeres de hoy, y porque no, a futuras generaciones. ¡Dejemos que nuestra piedra filosofal sea la Química, y así, convertir todo lo que la envuelve, en algo más meritorio y estridente que el mismo oro!
Tercer lugar, categoría mayor:
Ciertamente, el hombre es un enigma en muchos sentidos, pero podemos inferir que llegamos a esta conclusión por la manera en que el ser humano se alimenta del conocimiento adquirido mediante el cuestionamiento. Por esta misma razón se ha molestado en elaborar distintas obras que lo auxilien a encontrarle sentido a su vida. Como el resto de las ciencias, la Química nace entonces como una herramienta que el hombre utiliza para satisfacer el deseo de dominar todos los misterios que rodean a la humanidad. Con la alquimia se crearon los primeros peldaños de algo que llegaría no solo a tener trascendencia, sino que también cambiaría los cursos de la humanidad a través de los tiempos. Así es como la Química ha dejado su huella en la historia, por medio de inventos que fueron esenciales para el cambio; sin embargo, todas estas creaciones que han hecho posible que entráramos em la era tecnológica no siempre fueron hechas para conducirnos a una mejor vida. Durante las guerras mundiales, el hombre llegó a un estado deplorable, que lo obligó a refugiarse en las ciencias para dar fin a la situación. Paradójicamente, esta época se destaca por grandes avances ya que el ejército alemán tenía esta industria muy desarrollada. La producción de gases, como el ácido cianhídrico, fosgeno, arsénico y bromuro de xileno, le dio una ventaja a este poderoso ejército; mas no podemos olvidar lo devastador que fue al tomar en cuenta todas las vidas humanas que se perdieron, fue tal el impacto que hoy se le conoce a este período como “guerra química”. Así mismo, podemos ver cómo en la actualidad destruimos nuestra preciada capa de ozono por nuestra imprudencia. Nuestra ansiedad por los productos nuevos y por los automóviles nos esta llevando a un futuro incierto. El calentamiento global, producido por la acumulación del dióxido de carbono y demás gases del efecto invernadero, nos está contaminando sin darnos cuenta. El monóxido de carbono, tal vez uno de los contaminantes más peligrosos del aire, intoxica al cuerpo humano con cada vez más facilidad al haber más emanaciones de gases tóxicos de las fabricas que si bien nos brindan infinita tecnología, también nos destruyen. Además, no solo afectamos nuestros cielos, sino también nuestra naturaleza. El impacto ambiental producido por la industria de la química está acabando con lo más hermoso de nuestro país, su exotismo. Cada día más especies de animales y plantas desaparecen del territorio, continuamos sumando a esta lista de la perdición sin siquiera pensar en las consecuencias; a veces parece que el ser humano desea llevar su excelencia al límite, sin importar el precio. Sin embargo, no se debe pensar que la Química se ha moldeado con el fin de autodestruirnos, sino más bien de brindarnos una ayuda; por esta razón, se debe utilizar con cautela, despertando nuevas ideas, pero también tomando en cuenta sus consecuencias. En pleno siglo veintiuno gozamos de tantas comodidades que muchas veces olvidamos que habrá un mañana. Es ahí donde debemos ubicar nuestras metas hacia un país que pueda enfrentar los problemas de esta era. Costa Rica no puede permitir quedarse atrás como un país en vías de desarrollo, mientras la medicina y la industria crece cada vez más con ayuda de la química. La producción y la conservación de alimentos son procesos que hacía algunos años la sociedad no poseían. Mas ahora, con el avance de la química y su magnifico enlace con la vida diaria, se satisfacen múltiples necesidades con facilidad. De la misma forma, la medicina salva las valiosas vidas de muchos, curando enfermedades que antes se creían incurables; se podría pensar entonces que toda vida nace de la química. Al final, no podemos determinar si la química nos está cambiando para bien o para mal; esta funciona entonces como las sombras en una pintura. El lienzo del artista se convierte en el mundo, en la humanidad; mientras que las sombras y la claridad en este son las marcas que ha dejado la química en nuestra vida. No podemos dejar el cuadro totalmente oscuro o claro, debemos buscar un equilibrio que haga que todos los elementos en el lienzo destaquen la belleza de la obra. Así es como funciona la química; si bien es cierto debemos aprender de los errores, más importante aún que eso, es sacarles un máximo provecho y utilizar ese conocimiento ganado para nuestro beneficio.
El Concurso Nacional de Ensayo Científico es un programa anual, extracurricular, que tiene ocho años de realizarse en el país. Es organizado por la Fundación CIENTEC, conjuntamente con representantes del Ministerio de Educación Pública, el Ministerio de Ciencia y Tecnología, el CONICIT, el Instituto Tecnológico de Costa Rica, la Universidad de Costa Rica y la Universidad Estatal a Distancia. Agradecemos a todos los patrocinadores que lo han hecho posible:
Este programa es respaldado por el Fondo de Incentivos, Ley de Promoción del Desarrollo Científico y Tecnológico #7169. |
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